¿Qué diferencias hay entre el amor y la atracción?
La atracción: es un proceso físico, surge primero, de forma espontánea, con sentimiento menos profundo.
No aporta esa fuerza vital para que la relación se fortalezca, satisface ese deseo del encuentro y no necesita más que eso.
Solo le gustan las virtudes del otro, los defectos no provocarán ese sentimiento.
El amor: Surge habitualmente cuando la simple atracción se ve acompañada de otros sentimientos como el respeto, el cariño o la necesidad de estar junto a esa persona.
Es un proceso dilatado en el tiempo, va mucho más allá del egoísmo individual. Conoce los defectos de la persona amada, es consciente de ellos y sigues amando a esa persona.
El amor tiene la cualidad de hacer que un vínculo funcione. Una relación a distancia puede perdurar y sobrevivir ya que este impulsa a las personas a perseverar en sus metas.
Afecta el nivel de compromiso que sentimos por alguien al momento de definir que es lo que sentimos.
“El amor no conoce barreras, salta obstáculos, vallas y penetra en muros para llegar a su destino lleno de esperanza”
¿Es posible amar a alguien y sentir atracción por otra persona?
Totalmente cierto, esto ocurre frecuentemente, surge de forma natural. podemos amar a alguien y sentirnos atraídos por un tercero, no es incompatible, no tenemos el control, a diferencia del amor que implica compromiso, intimidad, o la pasión.
Esto puede ocurrir, tanto si nuestra relación tiene dificultades o es funcional, solo hay que proceder de manera coherente.
¿Qué hacer?
En casos similares hay que valorar y decidir, no forzar situaciones, ni llegar a acuerdos por lo socialmente convencional que nos impiden vivir como deseamos y, solo nos generan angustias.
No hay que culpar o hacer juicios sumarísimos de esta persona es mala y aquella es una víctima, lo importante es que se respeten los acuerdos que se tienen como pareja.
Nadie le pertenece a nadie, las parejas se eligen, crean vínculos, pero también optan por concluir las relaciones para continuar con una vida más feliz.
Las relaciones de parejas son complejas, pero siempre hay formas de solventar aquellas dificultades, cada integrante hace su aportación, gestionan sus emociones, pero no siempre pueden solos, entonces es momento de pedir ayuda profesional.